Anteriormente, si el tratamiento conservador de las venas varicosas no producía los resultados deseados, o si las complicaciones representaban un riesgo grave para la salud del paciente, los médicos prescribían la cirugía. En este caso, la vena afectada se eliminó por completo y, después de la operación, quedaron cicatrices en la piel. La medicina moderna permite, en ciertos casos, reemplazar una operación obsoleta con una terapia láser más avanzada.
La esencia del impacto es que un rayo láser con una determinada longitud de onda se dirige a la vena dilatada. Las células sanguíneas convierten el impulso entrante en energía térmica, como resultado de lo cual la vena afectada se sella, por así decirlo, y la sangre comienza a circular a través de vías sanas más profundas.
Al mismo tiempo, todos los tejidos adyacentes permanecen ilesos, ya que el rayo láser actúa de manera selectiva y el área del cuerpo en la que se realizó la manipulación no causa molestias posteriores debido a la vena discapacitada.
La cirugía con láser para las venas varicosas se divide en dos tipos, que se utilizan en diferentes situaciones. La corrección percutánea con láser se usa en la mayoría de los casos para el tratamiento de la malla venosa, que se puede llamar una etapa temprana en el desarrollo de las venas varicosas. El procedimiento se realiza sin contacto directo con la piel, y el resultado no es diferente al otro tipo de procedimiento, pero en este caso la vena no debe exceder los 3 mm de diámetro.
La coagulación con láser endovasal (EVLK) se usa con más frecuencia, en Europa este procedimiento se ha convertido en un método terapéutico prioritario, y el tratamiento quirúrgico de las venas varicosas se relega gradualmente a un segundo plano. EVLK implica una incisión microscópica en la piel a través de la cual se inserta una guía de luz en la vena dañada. Esta función le permite "pegar" libremente cualquier vena dilatada que no supere 1 cm de diámetro. Todo el proceso está bajo el control del diagnóstico por ultrasonido, por lo que el riesgo de error médico es mínimo.
Las revisiones negativas sobre la coagulación de las venas con láser suelen ser dejadas por personas que confiaron en un médico sin experiencia o ignoraron los consejos de un especialista.
Indicaciones y contraindicaciones
Cualquier procedimiento tiene indicaciones y contraindicaciones, que el médico tratante debe informar. En el caso del tratamiento de las varices en las piernas con coagulación láser, el especialista debe verificar cuidadosamente los requisitos previos para el procedimiento.
En primer lugar, la vena debe expandirse en la boca no más de 10 mm, de lo contrario, la terapia será inútil y el problema volverá pronto.
En segundo lugar, la vena debe tener un curso suave del tronco para que la guía de luz pueda pasar libremente a través de él de principio a fin.
En tercer lugar, no debe haber demasiadas venas varicosas.
Antes de iniciar el tratamiento con láser, es necesario tener en cuenta las contraindicaciones existentes para el procedimiento:
- tendencia a la tromboflebitis;
- cualquier enfermedad crónica en la etapa aguda;
- patología de la circulación sanguínea;
- expansión de la vena de más de 1 cm;
- procesos inflamatorios en el área afectada;
- enfermedades infecciosas acompañadas de temperatura corporal elevada;
- Baja movilidad del paciente por motivos de salud.
Si ignora las contraindicaciones existentes, puede haber consecuencias negativas que serán mucho más difíciles de eliminar. Para que el procedimiento sea exitoso, debe comunicarse solo con una institución médica especializada, que emplea especialistas experimentados y responsables.
como es el procedimiento
En una consulta preliminar con un médico, el paciente responde todas las preguntas necesarias y se somete a un examen para que el especialista pueda decidir si el tratamiento con láser de las venas varicosas ayudará en este caso y si es necesario. Después de eso, se prescriben las pruebas y, si no se encuentran contraindicaciones, se anuncia la fecha de la sesión.
No existe una preparación especializada para la coagulación con láser, pero el paciente debe seguir ciertas recomendaciones del especialista:
- se debe llevar ropa y zapatos holgados y cómodos, especialmente en los últimos días antes de la fecha señalada;
- unos días antes del procedimiento, debe dejar de tomar medicamentos que afecten la viscosidad de la sangre.
En la primera etapa, el flebólogo, junto con un especialista en diagnóstico por ultrasonido, marca y marca la ubicación de toda la parte de la vena afectada por las venas varicosas en el área afectada del cuerpo del paciente. Este paso puede variar en longitud: si la vena es recta y corta, el proceso solo llevará unos minutos, y si a menudo se tuerce y se involucra en una sección larga, el marcado puede demorar más.
La segunda etapa es el uso de anestesia local, que se usa con mayor frecuencia como novocaína, si el paciente no es alérgico a ella. El médico, bajo el control de una máquina de ultrasonido, corta cuidadosamente la vena afectada sin dañarla. Esta etapa es muy importante, porque no solo anestesia el procedimiento, sino que también evita que el rayo láser afecte los tejidos cercanos.
La eliminación de venas varicosas con láser comienza con la elección de un modo de radiación adecuado para el paciente por parte del flebólogo. Posteriormente se realiza una pequeña incisión, por la que se lleva una guía de luz hasta la vena si se realiza coagulación endovasal, o el láser actúa superficialmente si se opta por el método percutáneo. Con la ayuda de una máquina de ultrasonido, el flebólogo controla el proceso y mueve la fuente del rayo láser a lo largo de toda la vena dilatada.
Después del tratamiento con láser de las venas de las extremidades inferiores, deberá usar ropa interior de compresión durante dos semanas, y en los primeros días después del procedimiento, no solo durante el día, sino también por la noche. Además, inmediatamente después de la exposición y posteriormente durante dos semanas, deberá realizar caminatas de al menos 30 minutos.
Consecuencias de la terapia
En la mayoría de los casos, las venas varicosas en las piernas y otras partes del cuerpo son susceptibles de coagulación con láser sin efectos secundarios ni recaídas. Al principio, el paciente puede sentir molestias, dolor u otras molestias en la zona afectada, también pueden aparecer hematomas, pero estos van desapareciendo gradualmente. De lo contrario, necesitará la ayuda de un médico.
Si se interrumpió el curso del tratamiento con láser de venas varicosas en las piernas y otras partes del cuerpo, o si el paciente descuidó el consejo de un especialista, pueden ocurrir complicaciones más graves. El más inofensivo de ellos es la penetración de la infección a través de una herida abierta, que se trata con antibióticos. Una complicación más grave es la aparición de un trombo de venas superficiales o profundas, que se trata solo quirúrgicamente.